martes, 16 de octubre de 2012

Otras diez verdades musicales


1- Si hablamos de rock, Robert Johnson es el principio de todo. No busquéis DJ’s que decidieran usar el término “rock and roll” porque les parecía rimbombante, ni tipos más blancos que la leche que decidieron hacer música negra. No penséis en Roy Orbison, Jerry Lee Lewis o Elvis Presley. Todo empieza en Robert Johnson, aquel tipo negro que tocaba blues, y de quien se dice que vendió su alma al diablo a cambio de su habilidad con la guitarra.

2- Beethoven era sordo, sí, pero no de nacimiento, ni tampoco del todo. La sordera fue consecuencia de la vejez y la enfermedad. No obstante, eso no fue un impedimento para componer su mayor obra. Sí, era sordo, pero no era nuevo en la música cuando eso pasó: conocía el lenguaje musical, tenía ayudantes a la hora de dirigir, y, por supuesto, las teclas de su piano estaban más que contadas. De todas formas, esto tampoco resta mérito a sus últimas composiciones.

3- Slash no vale gran cosa como guitarrista. Es rápido, muy técnico, y un gran intérprete (su versión de Voodoo Child con Zakk Wylde no tiene desperdicio), pero carece por completo de alma. Si alguien quiere saber por qué la mejor versión del guitarrista es la de los Guns ‘n’ Roses, que mire hacia un flacucho malhumorado conocido como Axl Rose. Sin su presencia, el carácter desaparece.

4- Había una época en la que The Clash era el único grupo de punk que realmente hacía música. Luego surgieron nuevos grupos que también ponían ojo a lo que componían, pero la verdad es que estas cosas tienen más mérito cuando eres el primero que las hace.

5- AC/DC son unos genios. Puede que solo conozcan media docena de notas, pero llevan desde principios de los 70 tocándolas de forma que todas sus canciones son distintas.

6- Con respecto al punto anterior, la auténtica base de AC/DC es Malcolm Young, ese tipo con cara de tipo duro, que apenas se mueve por el escenario, y que se limita a soltar unas cuantas notas mientras Angus acapara toda la atención con sus frenéticos movimientos, su traje de colegial y sus solos agresivos. Malcolm es el cerebro del grupo, compone la mayoría de las canciones, toma las decisiones y, en general, hace todas esas cosas que hacen los tíos que mandan.

7- Metallica no solo es uno de los mejores grupos de la historia, sino que también es el mejor grupo en activo. Desde el Black Album, Metallica no se está cubriendo de gloria precisamente. Es más, ahora mismo hay bastantes músicos que lo están haciendo mucho mejor, pero Metallica sigue en activo. Si los Beatles al completo siguieran en activo… sería una imagen bastante asquerosa, porque dos están muertos… el caso es que Metallica es el mejor grupo en activo, y la prueba más clara es que, si te acercas a alguien que no haya oído hablar del rock en su vida y le pides que te diga algún grupo, lo más probable es que su respuesta sea… bueno, ya sabéis.

8- Sin embargo, a nivel musical, Megadeth es superior a Metallica.

9- El góspel mola. Es un placer culpable, pero irresistible, como pirarse las clases o reírse cuando alguien se cae. Todo el mundo siente deseos de agitar los brazos y dejarse llevar por las melodías tintadas de blues y soul. ¿Alguien lo duda? ¿Y entonces por qué reponen tantas veces “Sister Act”?

10- Like a Rolling Stone es una buena canción. No soy muy fan de Bob Dylan, pero reconozco que, cuando la compuso, además de cambiar la orientación de su carrera, estaba bastante inspirado. Pero, por más que se empeñe la revista Rolling Stone en decirlo, no es la mejor canción de la historia. Si Like a Rolling Stone es mejor que Stairway to Heaven, One o Voodoo Child (Slight Return), será que no merezco tener tímpanos.

domingo, 14 de octubre de 2012

The Legend of Zelda: Gatsby Times


El Gran Gatsby tuvo varias adaptaciones al cine. Todas pésimas. La "definitiva" fue dirigida por Jack Clayton, protagonizada por Robert Redford y Mia Farrow, y su guión fue escrito por Francis Ford Coppola.

La peli va de que ser rico no es para tanto, porque produce un tremendo hastío y un gran vacío existencial, y encima pierdes a Daisy, a la que quieres tanto y todo eso, así que, después de todo, ser pobre no es tan malo. Gatsby hace fiestas en las que él se aburre, los invitados ricos se aburren, la fauna local se aburre, y hasta los cámaras se aburren. ¿Se aburrirían tanto Coppola y Clayton?

Eso sí, en El Gran Gatsby sale ropa muy bonita, para que los invitados puedan acudir a sus orgías decadentes y soporíferas.

Nadie tiene ni puta idea de cuál es el mensaje de la novela (nadie que trabaje en Hollywood, quiero decir), y se nota. Una pista importante (aunque supongo que algo involuntaria) es la dedicatoria, antes del primer capítulo, de Scott Fitzgerald hacia su mujer, Zelda, cuya locura explotó varios años después de su publicación, pero imagino que por entonces ya sería visible. A ninguno de los cineastas que han afrontado esta historia le ha importado lo más mínimo todo eso de lo efímero del tiempo y la nostalgia por un pasado que ya nunca volverá, ni que el propio matrimonio se pasara su vida en común buscando momentos que pudieran alejarlo de su constante caída libre, y ponerlo en el camino de unos buenos viejos tiempos que nadie sabe con certeza si existieron realmente.

No os dejéis engañar por El Gran Gatsby. Los "nuevos ricos" tienen un aspecto bastante más parecido al de la foto de arriba.